por Carlos Sánchez Nogueroles | Abr 23, 2023 | Otros deportes, Tenis
El murciano suma el noveno título de su carrera tras derrotar a Tsisipas por 6-3 y 6-4
Con Carlos Alcaraz las victorias ya no sorprenden. Después de la semana fantástica que se ha marcado en el Barcelona Open, mejor conocido como Torneo Conde de Godó, doblegó al griego Stefanos Tsitsipas mostrando un ejercicio de autoridad y jerarquía al alcance de pocos. De esta forma revalida título por primera vez desde que es profesional y suma su tercer trofeo en lo llevamos de 2023. En el ATP 250 de Buenos Aires y en el Master 1000 de Indian Wells logró las otras dos conquistas.
Su dominio sobre la gran mayoría del circuito es tan abrumador, que a veces cuesta valorar lo difícil que es lo que está cosechando un tenista que ya luce entre los astros del deporte mundial. El talento que desprende en la pista se fusiona con una capacidad ganadora absolutamente desproporcionada para alguien de tan corta edad, y es que con el trofeo cosechado en la tarde de hoy ya colecciona nueve entorchados ATP en un palmarés que empieza a engordar a tiempo récord.
El portugués Nuno Borges, los españoles Roberto Bautista y Alejandro Davidovich, y el británico Daniel Evans fueron las víctimas que Alcaraz dejó por el camino hacia una nueva final. Además logro esto sin ceder, ni un solo set. Tsisipas, segundo cabeza de serie del certamen barcelonés apenas tuvo oposición ante el argentino Pedro Cachín, contra el canadiense Denis Shapovalov y frente al australiano Alex de Miñaur; sin embargo sufrió para derrotar al italiano Lorenzo Musetti en un largo encuentro que se fue hasta los tres parciales.
El griego de nuevo se veía las caras con el español en el Conde de Godó, después de que en 2022 se vieran las caras en los cuartos de final. Allí, el ex número uno venció a este por 6-4, 5-7 y 6-2. En los otros dos duelos anteriores la quinta raqueta del ranking tampoco había logrado derrotar a su bestia negra, por lo que se encontraba ante la oportunidad de batir a un jugador que le tiene comida la moral por completo.
Dominio abrumador
Para sorpresa generalizada el heleno salió mejor al choque. Varios errores del vigente campeón del US Open provocaron un break que pronto contrarrestó él mismo. Con el marcador igualado, empezó a jugar con más calma, consciente de que si hallaba su juego tenía ya mucho ganado.
El joven murciano volaba sobre la pista Rafa Nadal, por su parte Tsitsipas apenas sabía contener una bola que variaba indistintamente: a veces imprimía potencia, en otras ocasiones buscaba los efectos y también sacaba el arsenal de las dejadas. Esto provocaba un despiste en su rival, que no sabía como ganarle puntos, especialmente al resto. Fruto de todo este descontrol, una nueva rotura bastó al pupilo de Ferrero para cerrar la primera manga.
En el segundo set, el triple finalista del Godó recuperó la fiabilidad al servicio que le estaba faltando durante los compases previos. También comenzó a inquietar un poco más el saque del palmareño, que normalmente se sentía muy cómodo a la hora de servir. Con el empate a 2-2, llegó a momento de la verdad, ya que un par de errores de ateniense sumados a un globo inverosímil y otra dejada escandalosa de Alcaraz supusieron la casi sentencia al partido.
Con la fiabilidad que caracteriza al número uno español, dicho break fue suficiente para que, en blanco, lograra un juego que le encumbraba a los altares por tercera vez en la temporada. El campeón de la edición pasada repetía corona sin ceder ni un solo set. Un tenista que ya convierte los éxitos en algo cotidiano, ese el Carlos Alcaraz.
Alcaraz: «Tenía que intentar disfrutar en pista y olvidarme de la presión»
Nada levantar los brazos de la emoción, el doble ganador del ATP 500 de Barcelona se mostró muy satisfecho con su final ante los micrófonos de RTVE: «Hoy he estado yo, fluido y relajado en pista, sintiendo los golpes. Hoy era el momento de hacerlo. Estoy súper contento por ello. Sinceramente, no me suele pasar, pero ayer antes de dormir estaba tenso y esta mañana me he despertado nervioso también. Tenía que intentar de disfrutar de la final, de olvidarme de la tensión y de todo lo demás».
Por otra parte, también tuvo palabras acerca de la alcarazmanía que le está ocurriendo en los últimos meses: «Un crío de 19 años que acababa de llegar al circuito nunca se iba a imaginar que iba a tener tanta afición haya donde vaya. Es increíble disfrutar de toda la gente«.
Stefanos Tsitsipas, que con este resultado acumula su tercer subcampeonato en el Torneo Conde de Godó (los dos anteriores fueron contra Rafa Nadal) y el décimo en un torneo ATP de categoría 500, se tomó con humor y admiración el gran triunfo de Alcaraz: «Carlos, tómatelo con calma, hermano. Compartir es vivir. Enhorabuena otra vez. Tuve la oportunidad de verte jugar hace ya unos años y se veía que llegarías al circuito antes de lo normal. Me gustaría felicitarte por todo lo que has logrado en este último par de años, es impresionante. Eres todo un ejemplo para nosotros, como algo que nos obliga a seguir mejorando«.
por Carlos Sánchez Nogueroles | Abr 22, 2023 | Otros deportes, Tenis
El campeón de la pasada edición del Barcelona Open Banc Sabadell luchará por revalidar el título ante Tsisipas
Carlos Alcaraz ha vuelto al circuito de forma inmejorable, ya que después de una gran semana volverá a disputar una final. El murciano, que ha sufrido varios contratiempos por las lesiones entre final de 2022 y principios de 2023, peleará por un nuevo trofeo frente a Stefanos Tsisipas, número cinco del ranking ATP. De esta forma se cruzarán los dos principales cabezas de serie, situación soñada tanto por la organización como por los aficionados al tenis.
Hoy enfrente tenía a Daniel Evans, un viejo conocido del circuito que suele plantear partidos muy incómodos debido a su peculiar estilo de juego caracterizado subir continuamente a la red. El único duelo entre ambos databa de la primera ronda del ATP 500 de Viena en 2021, donde el de El Palmar venció por 6-4 y 6-3 al británico. En esta ocasión la victoria volvió a caer del lado español por un contundente doble 6-2, que hizo patente la superioridad del ex número uno mundial.
Desde el comienzo vimos el guion esperado: el veterano jugador trataba de sorprender en la red ante la imposibilidad de seguir el ritmo de bola del rival. Sin embargo, Alcaraz en el cuarto juego logró un break que encarriló el set a su favor. Otra rotura más cerraría una manga, en la que el actual campeón en Barcelona apenas tuvo problemas para desbordar al de Birmingham.
En el segundo set un 4-0 inicial parecía sentenciar el duelo, sin embargo dos juegos consecutivos provocaron ciertas esperanzas en Evans. Tras este breve despiste, el pupilo de Ferrero volvió a ordenarse, y sirviéndose de su gran derecha finiquitó el encuentro mostrando una gran autoridad.
El actual número dos del mundo obtiene así el vigésimo segundo triunfo en 2023, y el duodécimo sobre tierra batida. Con este éxito, accede a su cuarta final del curso tras hacer lo propio en el ATP 250 de Buenos Aires, en el ATP 500 de Río de Janeiro y en el Masters 1000 de Indian Wells. Tan solo cayó en el campeonato carioca, por lo que en caso de vencer el domingo sumaría el tercer entorchado del año.
Además, alcanza su duodécima presencia en una final ATP antes de cumplir 20 años, registro solo superado por Borg, Wilander, Becker, Nadal y Agassi. Curiosamente las tres derrotas en partidos por el título le han ocurrido en tierra batida, concretamente en el ATP 500 de Hamburgo de 2022 contra Musetti, en el ATP 250 de Umag de 2022 frente a Sinner y el citado evento brasileño ante Norrie.
Tsisipas tratará de frenarle en el cuarto intento
Si el español quiere levantar el que sería su segundo título en Godó de forma consecutiva, deberá deshacerse de un rival bastante habitual desde que aterrizó en el circuito. Hablamos de Stefanos Tsisipas, un jugador ante el que logró la primera victoria ATP contra un top 10. Dicho duelo ocurrió en la tercera ronda del US Open 2021, cuando el heleno ocupaba el tercer escalón del ranking y el palmareño era el número 55 del mundo, y en él, pudo remontar para dar la mayor sorpresa del certamen celebrado en Nueva York (3-6, 6-4, 7-6, 0-6 y 7-6).
Con el murciano ya metido entre las veinte mejores raquetas del planeta, se volvieron a ver las caras en los octavos de final del Masters 1000 de Miami, y allí de nuevo superó al pasado finalista del Open de Australia por 7-5 y 6-3. El primer precedente en tierra también sucedió en el ATP 500 de Barcelona, tras un encuentro que se fue hasta los tres sets (6-4, 5-7 y 6-2) pero, pero que, por tercera vez se llevó el nacido en 2003.
Mañana, en el mismo escenario de su último duelo, tendrá lugar una nueva oportunidad para que Tsisipas consiga por fin acabar con la imbatibilidad de Alcaraz que le produce auténticas pesadillas. A las 16:00 (hora local) comenzará un choque que será televisado por Movistar +, Esport 3, y la 1 de RTVE así como a través de la plataforma online RTVE Play.
por Carlos Sánchez Nogueroles | Mar 20, 2023 | Otros deportes, Tenis
El murciano, en un exhibición histórica, superó con contundencia a un Medvedev que acumulaba 19 victorias consecutivas. Mañana su nombre volverá a aparecer en el primer en el primer puesto del ranking ATP
Hay jugadores con un halo especial. Jugadores que poseen un potencial tan bestial que asusta hasta intentar investigar cuál será su límite. Uno de esos elegidos es Carlos Alcaraz, que a sus 19 años ha irrumpido con una fuerza descomunal en el universo tenístico. Una potencia de tal magnitud que asombra a propios y a extraños. Y es que tan solo 50 días después de perder el número uno en favor de Novak Djokovic, ha logrado volver a la cima sumando el octavo título en su palmarés.
La temporada del palmareño no estaba siendo fácil, ya que debido a una rotura abdominal se perdió el Open de Australia. Regresó al circuito coronándose en el ATP 250 de Buenos Aires, sin embargo una nueva lesión en la misma zona provocó su derrota en la final del ATP 500 de Río. A pesar de que este contratiempo le impidió disputar el ATP 500 de Acapulco, pudo llegar en plenas condiciones al Masters 1000 de Indian Wells, torneo que acaba de levantar sin ceder un solo set.
Kokkinakis, Griekspoor, Draper, Aliassime y Sinner fueron las víctimas de un Alcaraz que accedía a la final mostrando un gran estado de forma. Enfrente, un Medvedev cuya última derrota se remontaba a la cuarta ronda del Open de Australia (allá por el 20 de enero), se disponía a pelear por el cuarto título seguido tras las victorias en Rotterdam, Doha y Dubai. Y como suele ocurrir con los campeones, el reciente ganador del US Open sacó su mejor versión para aniquilar al ruso por 6-3 y 6-2 en apenas una hora y diez minutos de partido.
Recital de principio a fin
Desde el inicio la diferencia entre ambos era notoria: Daniil apenas podía sostener intercambios mientras que su oponente se encontraba pletórico. Fruto de dicha superioridad, un 3-0 se dibujaba en el marcador casi sin que nos diéramos cuenta de que había comenzado el encuentro. Y es que, aunque el también campeón en Nueva York mejoró sus prestaciones a mediados del primer set, el murciano, haciendo gala de una determinación brutal consiguió cerrar la manga.
Por si parecía poco el castigo, dos breaks iniciales fueron un mazazo brutal hacia cualquier intento de remontada del moscovita. Saques, derechas, dejadas, restos… La demostración de poderío del pupilo de Ferrero era tal que ni Medvedev ni el propio público podían creer lo que estaban presenciando. Tan solo dos juegos separaban al español de un nuevo trofeo. Una sonrisa irónica se dibujó en la cara del número seis mundial cuando logró evitar el rosco con un juego que casi le sabía gloria.
La mayor definición de lo que significa Carlos Alcaraz como tenista llegaría poco después, ya que tres dejadas de fantasía terminaron por reflejar un 5-1 que finiquitaba las esperanzas del segundo jugador con más puntos en 2023. Haciendo gala de una excelente combinación de saques y voleas ganadoras puso el broche al espectáculo en el desierto. Sonríe Carlos y sonríe el tenis. Larga vida al show.
«Este ha sido el torneo perfecto»
Tras lograr una de los triunfos más importantes de su corta pero exitosa carrera, el flamante vencedor del denominado «Quinto Grand Slam», pasó por rueda de prensa para dejar sus impresiones acerca de su rendimiento en el certamen californiano: «Se siente increíble ganar el trofeo aquí y recuperar el número 1 del mundo, diría que este ha sido el torneo perfecto. Para mí ha sido brutal, este era un torneo que realmente soñaba con ganar».
También hablo sobre la evolución que ha tenido respeto al año pasado. «Creo que mi tenis tampoco ha mejorado tanto desde el año pasado, donde sí he mejorado mucho es a la hora de no sufrir tanta presión, de salir ahí fuera y jugar relajado. Eso es para mí lo más importante. Dentro de la pista no tengo dudas a la hora de elegir mis golpes, me siento muy cómodo dentro de la cancha y realmente confío en cada tiro que realizado. Eso también me ha llevado a alcanzar este gran nivel, porque si fallo tampoco le doy muchas vueltas«.
Preguntado por Djokovic, el murciano quiso dejar claras las ganas que tiene de volver a verse las caras con el serbio. «Novak es uno de los mejores tenistas del mundo, eso es obvio. Si quieres ser el mejor, tienes que vencer al mejor, así que estoy deseando que vuelva. Tengo muchas ganas de volver a enfrentarme a él«.
Autor: Carlos Sánchez
por Carlos Sánchez Nogueroles | Dic 18, 2022 | Fútbol Internacional, Mundial
El astro argentino fue decisivo en una final inolvidable que se llevó la selección albiceleste desde los once metros, tras observar cómo Francia logró empatar en los 90 minutos y en la prórroga. Una histórica actuación de Mbappé, autor de tres goles, no fue suficiente para derrotar a un país que vuelve a ser Campeón del Mundo 36 años después
La Final del Mundial es el partido de los partidos. Ese encuentro que todo jugador sueña en disputar alguna vez, y en el que la gloria y la decepción están separadas por detalles casi inapreciables. Argentina y Francia se medían en una final que no solo iba a decidir cuál de los dos conjuntos alzaba con la Copa del Mundo por tercera vez, sino que además estaba en juego el trono entre Kylian Mbappé y Leo Messi. Los actualmente compañeros en el PSG, se disfrazarían de rivales para deliberar si todavía el genio rosarino seguía siendo el mejor o en cambio la máxima estrella francesa se proclamaba nuevo monarca del fútbol mundial.
De hecho, Messi y Mbappé estaban empatados a cinco goles antes de enfrentarse en dicho duelo histórico. El capitán albiceleste además había superado en el registro goleador a Batistuta y Maradona, logrando convertirse en el máximo artillero de la historia de su selección en los Mundiales. Respecto a las asistencias, la leyenda del FC Barcelona había sumado tres por las dos del canterano del Mónaco.
En cuanto al recorrido de ambas selecciones, los galos llegaban a la cita decisiva de Qatar 2022 tras derrotar a Polonia por 3-1, a Inglaterra por 2-1 y a Marruecos por 2-0. Por su parte el gigante sudamericano, en un recorrido más tumultuoso, había vencido a Australia por 2-1, a Países Bajos en penaltis (2-2 en los 90 minutos) y a Croacia por 3-0.
Tan solo encontramos tres precedentes entre ambos combinados en el mencionado torneo internacional. El país del Río de la Plata superó a su hoy rival en el Mundial de Uruguay de 1930 por 1-0 y en el Mundial de Argentina de 1978 por 2-1. Ambos triunfos datan de la fase de grupos. La única victoria de «Les Bleus» fue en la Copa Mundial de Rusia 2018, encuentro que acabó 4 a 3 favor de estos.
Mucho tiempo llevaba Argentina esperando este momento. Nada menos que 36 años. Y cuando ansias tanto algo, la alegría por conseguir ese objetivo se transforma en una euforia que quedará para siempre en el recuerdo. Pues bien, un inmenso Leo Messi pudo contener a un titánico Mbappé, cogiendo así el testigo de un Maradona que desde el cielo observaba como el planeta fútbol volvía a teñirse de azul y blanco.
Desde el comienzo los hombres de Scaloni salieron más confiados y con el propósito de dominar al rival. La entrada de Di María en el once otorgó un dinamismo a su equipo muy difícil de contener por la campeona en Rusia 2018. Precisamente una entrada del futbolista de la Juventus por banda izquierda provocó que Dembelé tuviera que intentar frenarle, algo que hizo pero de forma errónea, ya que un contacto de este por detrás bastó para que el árbitro señalara penalti. Messi rubricó la acción con un tanto muy especial para él, ya que se trataba de su primer gol en una Final de Copa del Mundo.
El 1-0 fue un chute de adrenalina en la bicampeona mundialista, que veía como estaba controlando el partido prácticamente a placer. La imagen de una entregada Francia contrastaba con la confianza y el entendimiento de los oponentes . Sin embargo, es cierto que Lloris no tenía que intervenir demasiado gracias al trabajo defensivo de sus compañeros. Precisamente cuando estos buscaron ir al ataque, un tremendo error de Upamecano provocó una contra entre Julián Álvarez, Mc Allister y Messi que culminó un Di María, de nuevo decisivo en una final como lo hiciera en aquel «Maracanazo» de la Copa América 2021.
Deschamps cambió a Giroud por Kolo Muani y a Dembelé por Thuram en un síntoma de que no le estaba gustando nada lo que sucedía en el terreno de juego. Tras el paso por vestuarios, los finalistas en Brasil 2014 siguieron con las buenas sensaciones con las que habían acabado la primera parte. De Paul y Julián Álvarez probaron a Lloris sin éxito. La más clara del conjunto sudamericano llegó merced de una maniobra de Di María que remató Messi cerca del arco francés.
Argentina tuvo otra ocasión a la contra luego de aprovechar los huecos que dejaban los europeos atrás, pero Upamecano abortó el lance después de una gran conexión entre Messi, Mac Allister y Julián. Acuña entró por Di María, que se marchó con gestos evidentes de agotamiento físico. Mbappé amenazó con un tiro desde fuera del área en uno los pocos acercamientos de Francia realizados antes del minuto 70. A partir de dicho instante, las entradas de Camavigna, y en especial de Coman, otorgó a «Les Bleus» un ritmo muy diferente al que habían mostrado hasta ese momento.
Aunque estos revulsivos les iban acercando al gol, el partido estaba un poco en tierra de nadie con una Argentina bien organizada que hasta ahora soportaba sin problemas el empuje del adversario. Sin embargo, un balón largo de Mbappé sería el inicio de una fatídica acción en la que Otamendi derribó a un Kolo Muani que se marchaba solo ante el Dibu Martínez. El ariete parisino colocaría el 2-1 desde los once metros. Dos minutos después Coman le robó la cartera a Messi, y Mbappé logró establecer las tablas en el marcador gracias a una buena pared con Marcus Thuram.
No era un sueño. En dos prácticamente aisladas los gallos habían empatado mostrando una gran efectividad. Los últimos minutos del tiempo reglamentario fueron un total sufrimiento para la selección albiceleste, moralmente destruida por los mazazos que habían supuesto la igualada cuando prácticamente se veían campeones. A pesar de la agonía, Messi pudo volver a adelantar a los suyos en un tiro de supo desviar Lloris.
En la prórroga Francia continuaba acosando a una Argentina tocada mental y fisícamente. Las entradas de Paredes y Lautaro Martínez por unos exhaustos De Paul y Julián Alvaréz volverían a conducir el juego hacia los intereses de Scaloni. Pocos minutos más tarde, Lautaro perdonó tras una enorme jugada entre Messi y Mac Allister; y en el rechace Varane le sacó con la cabeza un gran disparo a Montiel. De nuevo Lautaro no pudo aprovechar un servicio increíble de Acuña con el exterior, ya que un imperial Upamecano salvó «in extremis» el gol cuando el delantero de Inter de Milán se disponía a engatillar hacia la meta defendida por el cancerbero del Tottenham.
Esta confianza impulsó a los albicelestes en la segunda parte del tiempo extra. Un pase que parecía inocente de Montiel fue exprimido por Lautaro, Enzo y Messi, y cuando estaba todo de cara en las botas del autor de las últimas ocasiones erradas, Lloris salvó su disparo pero no pudo con el rechace del 10; que convirtió el segundo tanto en su cuenta, redondeando así su histórica actuación. Francia en un intento desesperado consiguió provocar un penalti que aprovechó Mbappé, empatando así la contienda a falta de dos minutos del final. Dibu Martínez con una gran parada a Kolo Muani salvaría a los suyos en la última acción de la prórroga.
Penaltis. Llegaba el momento del drama. Ahora o nunca. Gloria o fracaso. Messi metería el primero para su país, algo que Mbappé repitió. Coman mordería el polvo debido a una gran atajada del Dibu Martínez, sin embargo no fallaría Dybala. Tchouameni envió fuera su lanzamiento, algo que provocaba que Francia lo tuviera casi perdido. Paredes y Kolo Muani cumplieron con su deber. Montiel tenía la responsabilidad de coronar, y con todo el pueblo argentino empujando, transformó con el alma un penalti que significaba todo. De Diego a Lionel. Casi 40 años más tarde Argentina volvía a ser Campeona del Mundo.
FICHA TÉCNICA
Selección de fútbol de Argentina: Emiliano Martínez, Tagliafico (Paulo Dybala, minuto 120), Cristian Romero, Nahuel Molina (Montiel, minuto 90), Otamendi, Enzo Fernández, Mac Allister (Pezzella, minuto 115), De Paul (Paredes, minuto 101), Messi, Julián Álvarez (Lautaro Martínez, minuto 102), Di María (Marcos Acuña, minuto 63)
Selección de fútbol de Francia: Lloris, Upamecano, Theo Hernández (Camavigna, minuto 70), Koundé (Disasi, minuto 120), Varane (Konaté), Kylian Mbappé, Griezmann (Coman, minuto 70), Tchouameni, Dembelé (Kolo Muani, minuto 40), Rabiot (Fofana, minuto 95), Giroud (Marcus Thuram, minuto 40
Tarjetas: Enzo Fernández (minuto 51), Rabiot (minuto 54), Marcus Thuram (minuto 86), Giroud (minuto 94), Marcos Acuña, minuto 97), Paredes (minuto 113), Montiel (minuto 115), Emiliano Martínez (minuto 125)
Árbitro: Szymon Marciniak. Arbitro VAR: Tomasz Kwiatkowski, Juan Soto Arévalo
Autor: Carlos Sánchez
por Carlos Sánchez Nogueroles | Dic 14, 2022 | Fútbol Internacional, Mundial
Hay veces que en la vida y en el fútbol la ilusión, el trabajo duro y una pizca de suerte dan recompensa. Eso fue lo que le ha sucedido a Marruecos en un mes mágico que ha provocado la ilusión en un país que no suele tener gran desempeño ni en campeonatos mundiales ni siquiera en continentales. La selección norafricana encarna garra, pasión, lucha y espíritu competitivo; cualidades que les han hecho romper los moldes en una actuación histórica que ya forma parte de la historia de los Mundiales.
Tras eliminar a Portugal y a España en dos duros encuentros que los encumbraron al estrellato mediático, hoy tenían enfrente la que es probablemente la peor selección para seguir avanzando en el sueño qatarí: Francia. Y es que «Les Blues» pese a que no practican el fútbol más bonito, es un conjunto muy físico que te asfixia y saber lucir perfectamente sus armas para doblegarte cuando menos te los esperas. Es como si cruelmente esperaran su momento con el objetivo de liquidarte en pocos movimiento, que aunque son poco elaborados, acaban por tornarse en mortíferos. Hoy volvieron a demostrar por qué son los favoritos en muchas quinielas y derrotaron a Marruecos en un ejercicio de paciencia, solidez y compromiso. En la gran final del Mundial de Qatar 2022 se verán las caras con la Argentina de Leo Messi en lo que es un choque inédito en la citada ronda.
Pocos cambios en los dos equipos con respecto al duelo que disputaron en cuartos de final. Deschamps solo alteró los cromos de Rabiot y Upamecano por Fofana y Konaté, mientras que lo que más sorprendió en la alineación de Regragui fue una variación de esquema con el pasaron a jugar con defensa de cinco. En cuanto a las novedades en el once de la sorpresa del Mundial, Mazraoui volvía a la titularidad en detrimento de Attiat-Allah, y Saiss junto a Dari (ambos suplentes en cuartos final) acompañaban a El Yamiq en el trío de centrales.
El fútbol a veces tiene cosas imprevisibles, porque desde el inicio el que trató de proponer ofensivamente fue Marruecos con una línea defensiva que se colocó más adelantada que en los primeros minutos contra Portugal. El atrevimiento lo pago bien caro ante una Francia que castiga, ya que en una jugada aparentemente inocente Varane filtró un pase a Griezmann que El Yamiq no supo cómo defender, «El Principito» centró hacia Mbappé, y después de dos disparos erráticos del jugador del PSG, el balón llegó a Theo Hernández para que con una gran volea batiera a Bono. Esto no había hecho nada más que empezar y la cuesta ya era muy empinada en la piel de «Los Leones del Atlas».
Este mal sabor de boca no fue mal digerido por el conjunto magrebí, que se estaba mostrando cómodo con el balón y con ganas de generar ocasiones de gol. Esta actitud les llevó a disfrutar de un disparo peligroso de Ounahi tras una buena jugada entre él mismo y Mazraoui, en la que Lloris sacó una gran mano. Sin embargo, entre que Francia apenas sufría en su área y que ellos ya no eran la muralla infranqueable, la contienda empezó a coger tintes galos.
Primero Konaté sirvió un buen envió a Giroud que Saiss no supo despejar, y el delantero del Milan estrelló el esférico en el poste. Más tarde Tchouaméni consiguió romper líneas merced de una gran conducción, se la entregó a Mbappé pero milagrosamente El Yamiq salvó su disparo bajo palos, y en el rechace el propio jugador madridista vio a Giroud solo en área, que con todo a su favor perdonaría el segundo tanto. Varane dispuso de otra gran oportunidad después de un córner, no obstante su remate en el primer palo se marchó desviado. En un jugada aislada tras un saque de esquina, El Yamiq se inventó una chilena que se topó con la madera en lo que significaría la ocasión más clara de Marruecos en todo el partido.
Después del paso por vestuarios, la selección de Regragui continúo tratando de asaltar una barrera que ya no eran ellos, sino los rivales. Un inspirado Boufal se asoció con Ziyech para generar un centro que Konaté despejó «in extremis», y en la segunda jugada Attiat-Allah no supo conectar el rebote.
Pasaban los minutos , y el enfrentamiento estaba mucho más donde quería Deschamps: su equipo apenas sufría y las llegadas más peligrosas habían sido protagonizadas por sus futbolistas. Mbappé y Konaté pudieron sentenciar el encuentro, en cambio el gran protagonista sería Marcus Thuram, que primero con una buena pared entre él y Fofana, y más tarde añadiendo en la ecuación a Mbappé, Kolo Muani se aprovechó del balón repelido tras un disparo de la estrella de PSG con el que dinamitó el encuentro. Esta herida mortal acabó con la ilusión de Marruecos, que terminó por capitular ante el poderío de los galos.
Apunten esta fecha: domingo 18 de diciembre a las 16:00. Este es el día señalado para el duelo que medirá a las dos mejores selecciones del torneo celebrado en Qatar. A un lado, la Argentina de Leo Messi, al otro la Francia de Mbappé. En juego nada más y nada menos que añadir la tercera estrella a su palmarés. Disfrutemos de un partido que pase lo pase se escribirá con letras de oro en el álbum de la historia del fútbol mundial.
FICHA TÉCNICA
Selección de fútbol de Francia: Lloris, Theo Hernández, Konaté, Varane, Koundé, Fofana, Mbappé, Tchouameni, Griezmann, Dembelé (Kolo Muani, minuto 79), Giroud (Thuram, minuto 65)
Selección de fútbol de Marruecos: Bono, Saiss (Amallah, minuto 20), Dari, Mazraoui (Attiat-Allah, minuto 45), El Yamiq, Achraf, Boufal (Aboukhal, minuto 67), Amrabat, Ounahi, Ziyech, En-Nesyri (Hamdallah, minuto 66)
Tarjetas: Tan solo Boufal (Marruecos) fue amonestado
Árbitro: César Arturo Ramos Palazuelos. Arbitro VAR: Drew Fischer, Nicolás Gallo Barragán