El equipo Blue ha dado un golpe sobre la mesa en el partido de ida de la semifinal de la Carabao Cup colocando pie y medio en la final, la gran novedad del partido fue el regreso al once titular de Romelu Lukaku, marginado del equipo contra Liverpool por sus declaraciones a Sky Italia que no cayeron bien en el seno del equipo.
Tuchel cambió el sistema para este partido saliendo con línea de cuatro y dos extremos con la clara intención de no trabarse con un sistema espejo, los Blues empezaron ganando con un gol de vestuario en el 5′ de Kai Havertz a pase de Marcos Alonso, el Tottenham no supo cómo reaccionar y se vio superado en todo sentido a lo largo del primero tiempo, el Chelsea triangulaba muy bien entre sus cinco volantes y le ganaron el medio campo a Hojbjerg y Skipp, en el 33′ Lukaku recibió un balón en largo y tuvo espacio para correr por primera vez en el partido, recibió una falta y del tiro libre vino el 2-0 con un autogol de Ben Davis luego de un mal despeje de Tanganga, luego en el 40′ Lukaku tuvo una oportunidad clara de gol para marcar el 3-0 pero el balón se fue a centímetros del palo derecho de Lloris, el primer tiempo terminó con diez remates del Chelsea contra ninguno del Tottenham.
En el segundo tiempo Conte envío al campo a Dembélé por Doherty cambiando a línea de cuatro, mientras que Tuchel envío a Werner por Havertz que terminó la primera parte lesionado, el Tottenham remató por primera vez en el partido en el 50′ gracias a un tiro libre de Kane que Kepa tapó bien, el Chelsea generó oportunidades de gol claras para poner el 3-0, primero en el 60′ Werner recibió el balón en la banda izquierda, recortó hacia dentro y remató al segundo palo pero el balón se fue afuera por poco, tan sólo cuatro minutos después el alemán tuvo un mano a mano con Lloris, intentó una vaselina pero el francés se la adivinó y tapó el remate y generaron otra más en el 76′ con un centro de Marcos Alonso que Ziyech remató de volea cerca del área chica pero el balón se fue por encima del travesaño, en los últimos minutos el Chelsea tuvo varias contras para sentenciar la serie pero no pudieron culminar bien las jugadas.
Con esta victoria el Chelsea da un golpe de autoridad en la serie y el Tottenham está contra la pared viéndose obligado a marcar al menos dos goles en su estadio la semana que viene, el escenario es poco alentador para Conte y sus dirigidos.
Autor: Luis Acevedo.
