El príncipe que nunca se convirtió en rey

El príncipe que nunca se convirtió en rey

Neymar, el príncipe que nunca se convirtió en rey. Ney comenzó su carrera en Los Santos, Brasil. Desde 2009 hasta 2013 el jugador brasileño se hizo muy conocido por su bonita manera de jugar con el balón, muy al estilo Ronaldinho y dejando detalles de mucha calidad. Es por ello que, clubes grandes como el FC Barcelona o el Real Madrid mostraron su interés en él. En Brasil acabó marcando un total de 134 goles en 220 partidos, destacando y debutando en la selección brasileña en esos años.

Su carrera en el FC Barcelona

En julio de 2013, Neymar despegaba hacia Barcelona. Un nuevo reto en su carrera para cumplir su sueño de ser una verdadera estrella en el club azulgrana. Desde luego, el brasileño lo logró. Marcó un total de 105 goles en 185 partidos, protagonizando uno de los mejores y para muchos el mejor tridente de delanteros de la historia. Juntos a Luis Suárez y su gran amigo Leo Messi, Ney probablemente se convirtió en el jugador más querido por la afición culé en muy poco tiempo. Tuvo un futuro firme con la posibilidad de ganar algún que otro balón de oro y más trofeos.

Sorprendentemente, la mala gestión de Bartomeu en el club blaugrana, hizo estallar la bomba del mercado del año 2017. Neymar se marchaba al Psg por una cantidad de 222 millones de euros. Lo que permitió al Barça hacer fichajes que no fueron acertados como el de Coutinho o el de Dembelé. La carrera de Neymar en el PSG ha sido buena, pero no ha ganado ninguna Champions ni mucho menos un balón de oro, por el cual optaba mucho más en Barcelona, donde llegó a ganar hasta un triplete. A pesar de esto, nos ha dejado señas muchos partidos de su notable calidad como frente al Bayern Múnich en Champions.

 

Dejando de lado el fútbol europeo, Neymar finalmente se ha acabado marchando al Al-Hilal equipo Saudí, para terminar de formar junto a Benzema y Cristiano Ronaldo, una liga que cada vez se está llevando a más jugadores tops.

Esta es la historia de un verdadero príncipe, que lo tenía todo para ser rey pero que nunca llegó a serlo.