El austriaco sigue dando pasos adelante en su mejoría y derrota a Franscisco Cerúndolo por 6-4 y 6-3 para colarse entre los cuatro mejores del torneo asturiano

Si hablamos de Dominic Thiem muchos recordaran sus batallas contra Rafa Nadal en Roland Garros o su espectacular 2020 en el que llegó a ser número tres del mundo y obtuvo el US Open, título que hasta ahora es el más valioso de su carrera. Fue precisamente después de esa dura temporada cuando las lesiones le cortaron en seco, y aunque el año pasado tuvo algunos brotes verdes con unas semifinales en el Masters 1000 de Madrid, de nuevo los problemas físicos aparecieron en el horizonte del campeón de Grand Slam.

Tuvimos que esperar más de ocho meses para volver a verle en pista, tiempo que trascurrió desde el Mallorca Open celebrado en junio de 2021, hasta el Challenger de Marbella disputado en marzo de 2022. No fue hasta el Challenger de Salzburgo cuando volvió a rencontrarse con la victoria, ya que desde el torneo de la Costa del Sol hasta dicho certamen no logró ningún triunfo, y encima lo hizo obteniendo un solo set en siete partidos. Es decir, estuvo la friolera de 420 días sin saborear la victoria.

El principio del cambio

A pesar de que Bagnis le venció en la siguiente ronda, su confianza era otra, algo que demostró con buenas actuaciones en la gira de tierra veraniega. Unos cuartos de final en Bastad y Kitzbuthel, y unas semifinales en Gstaad fueron fundamentales para que volviera a creer en él mismo.

Las dudas sobre el rendimiento del residente en Viena retornaron tras la gira americana de cemento, y especial tras la paliza que le endosó Ugo Humbert en la final del Challenger de Rennes por un contudente 6-3 y 6-0. Sin embargo, si hay algo que le sobra a nuestro protagonista es fuerza de voluntad, porque todo este dolor lo transformó en ganas de superarse a sí mismo y casi tres meses más tarde ha vuelto a pisar unas semifinales atp. Este resultado llega en Gijón, ciudad que por primera vez cuenta con un evento de categoría atp.

Un cómodo debut ante Sousa fue el inicio de la andadura de Thiem en el abierto asturiano. Las primeras dificultades llegaron ante el estadounidense Marcos Giron, un jugador plenamente asentado en el circuito que se antojaba como un rival de bastante entidad. Y aunque el norteamericano fue el ganador de la primera manga, el centroeuropeo supo encontrar la forma remontar un partido que acabó conquistando por 3-6, 6-4 y 6-0.

Hoy tenía enfrente a Francisco Cerúndolo, uno de los tenistas que más puestos del ranking ha subido en 2022. El argentino fue la gran sorpresa en el Masters 100 de Miami  venciendo a nombres de la talla de Tiafoe, Monfils o Sinner. Sin duda su mayor éxito llegó de la mano de Bastad, torneo donde obtuvo su primer título atp tras vencer al también argentino Sebastián Baéz.

Dos breaks, uno para cada uno, fueron la carta de presentación de un choque que se antojaba como un gran oportunidad para ambos. Los primeros juegos demostraban una gran igualdad y apenas existían bolas de break. Todo cambió con 3-4 en el marcador, momento en el cual el bonaerense cometió unos errores no forzados que bastaron para decidir la manga a favor del austriaco.

Thiem supo llevarse el partido a su terreno

De nuevo otra rotura nada más arrancar el segundo set adelantaba al ex top 10, que merced de la consistencia y la paciencia conseguía desesperar a un Cerúndolo demasiado precipitado. Cuando parecía que la situación se encontraba más que controlado para Dominic, su oponente trató de subir a la red para presionarle, estrategia que desconcentró a este y equilibró el parcial.

Con 3-2 vivimos un momento clave en el devenir del choque, ya que el pupilo de Massu consiguió aguantar las embestidas del sudamericano, que en esos instantes estaba disfrutando de los mejores minutos en cancha. Pero como si fuera un déjà vu, la premura volvió a ir en su contra, puesto que desperdició una ocasión de oro enviando fuera una derecha paralela que, en caso de entrar, se hubiera convertido en un importante break. Este error hizo mucho daño mental a Fran, quién prácticamente regaló tres juegos seguidos que pusieron el punto y final al encuentro.

Primeras semifinales en pista dura desde 2020

Con este triunfo volverá a disputar unas semifinales atp, instancia que no alcanzaba en un torneo celebrado en pista rápida desde que lo hiciera en las ATP Finals de 2020, encuentro en el que venció a Djokovic para alcanzar la que hasta ahora es su última final en el circuito atp. En la siguiente ronda peleará por una plaza en la final de Gijón contra el ruso Andrei Rublev, primer cabeza de serie del torneo y máximo favorito al título.